Estamos en pleno mes de diciembre, y por tercer año consecutivo participo en el Parrandón Navideño de mi querida amiga Angélica de «Bizcochos y Sancochos». Es un encuentro en la que cada año y por una semana blogueras amigas compartimos nuestras recetas más especiales. Este año he escogido una receta muy significativa para mí, las papitas de leche, un dulce típico de los Andes venezolanos.
Esta iniciativa me gusta mucho, es como el pistoletazo a prepararlo todo para Navidad. Este año me he animado no por una receta navideña como tal, si no más bien una receta que me traslada a mis orígenes y niñez, como son estas papitas de leche.
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Las papitas de leche son un dulce típico de la ciudad en que nací, Mérida. Para mi son especiales por ser de mi tierra pero también por recordarme a mi abuela Eva. Ya he hablado de mi abuela antes por su gran talento en la cocina y de sus manos que convertían cualquier plato en majar de Dioses.
De mi abuela Eva tengo unas ricas arepas de yuca, por las que desvivía. Entre los recuerdo de mi niñez que más aprecio son los que pasaba en casa de la abuela junto con mis primas Elixa y Rossana, mis mejores amigas, y más que amigas hermanas.
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La abuela Eva siempre tenía algo rico de merienda, conocía mucho de la cocina y de la dulcería criolla, como le decimos a los dulces típicos venezolanos. Cuando la abuela hacía las papitas de leche la casa entera se impregnaba del olor dulce de la leche caramelizada, y sin mentir, salía su aroma por toda la calle.
Yo me sentía en la gloria total, y recuerdo centenares de veces, encontrar el sitio donde escondía las papitas de leche y robarle unas cuantas como un pequeño ratoncillo.
A mi prima Elixa en cambio, después darse muchos atracones de papitas de leche, las aborreció de tal forma que hasta el sol de hoy como ella misma dice, no quiere saber nada de estos dulces de leche ni afines. Yo si que sigo enamorada de estos dulce bocados.
Entre mis primas, mi ,tía y yo recordamos, que su receta mágica infalible era mezclar leche en polvo con almíbar de azúcar y vainilla. Todo en una olla en la cual a fuego lento iba removiendo hasta obtener el punto adecuado al que debía sacarla del fuego. Obtenía una masa de leche moldeable con la cual hacía las papitas de leche.
Era una especie de masa elástica, diríamos en Venezuela, una masa amelcochada, en alusión a otro dulce típico venezolano a base de melado de caña llamado Melcocha. Ambos tienen un procedimiento parecido, según los hacía mi abuela Eva.
La técnica de mi abuela tiene su truco y se necesita estar muy pendiente de la olla para conseguir el punto correcto. En la red corren muchas recetas, una muy sencilla, a base de leche en polvo, leche condensada y azúcar glass, en dónde se unen todos los ingredientes, se amasan y se hacen las papitas de leche.
Como todo en las cocinas tradicionales, las recetas se adaptan a lo que se tiene a mano. Por esa razón algunos o hacen con leche en polvo, otros a partir de leche y azúcar y otro con leche condensada directamente. Y es que todos los tipos de leche están muy bien relacionados. Así que sirve igualmente.
Yo te dejo mi receta en parte con lo recordamos de la abuela y en parte con mi toque, ya que nunca tuve registros conscientes de los pasos claves de la receta de mi abuela. Así que te dejo mi receta de las papitas de leche.
Receta de las papitas de leche andinas
Ingredientes:
- 2 tazas de leche en polvo
- 1/3 de taza de almíbar de azúcar
- 1/3 de taza leche condensada
- Clavos de olor para decorar
Para el almíbar:
- 1 taza de agua
- 1 taza de azúcar
Nota: No se utiliza el almíbar completo. Lo puedes guardar para otra receta.
Preparación:
1. El primer paso es preparar el almíbar. Coloca el agua a fuego, y al hervir añade la azúcar. Remueve hasta disolver el azúcar y apaga.
2. Coloca en un bol, la leche en polvo, el almíbar y la leche condensada. Amasa hasta mezclar todos los ingredientes.
3. Obtendrás una masa un tanto pegajosa, déjala reposar algunos minutos para que tome consistencia.
4. Toma porciones pequeñas de masa de leche parecidas a una trufa. Si es necesario utiliza leche en polvo para ayudar hacer las bolitas de leche.
5. Con la parte contraria al filo de un cuchillo, debes hacer la marca de una cruz en la parte de arriba de la papita de leche, y justo en el centro incrustar el un clavito. El clavito es solo para decoración, pero le da un ligero aroma a las papitas agradable.
6. Coloca las papitas de leche en una bandeja y déjalas secar unos 30 minutos, y listas para comer.
¡Buen provecho!
Notas:
- Depende del lugar que las haga y la temperatura que tenga el ambiente, secarán más rápido o menos. Lo que si debes tener en cuenta es que la masa te quede suave y no seca, ya que si es así con el tiempo se secarán demasiado y quedrán como una piedra. Por lo que es mejor que queden más bien suaves y pegajosas que algo seca la masa.
- El almíbar de azúcar se puede sustituir por azúcar glass.
- El tamaño de las bolitas de leche debe ser más bien pequeño, como un pequeño bombón o trufa ya que son dulces y contundentes.
- Se puede partir directamente de leche condensada, colocarla en una olla a fuego bajo, removiendo constantemente hasta obtener una masa moldeable.
- Otra opción es colocar leche líquida y azúcar en una olla a fuego medio bajo hasta obtener leche condensada y después a fuego bajo hasta obtener la masa característica de estos dulces.
- Así como si partes de leche condensada o de leche y azúcar debes hacerlo con mucho cuidado y a fuego bajo, removiendo constantemente sin quitarle un ojo a la olla. La idea es formar una masa pero si se calienta demasiado puede pasa directamente a dulce de leche y eso no es lo que se quiere.
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Nos vemos en una próxima receta.